En 1910, presentaron en la
Exposición de los Independientes una pintura que todos notaron.
Se titulaba "Puesta
del sol sobre el Adriatico" y el catálogo señalaba
que era de un tal JB Boronali.
Como
se trataba de una pintura abstracta hubo un montón de comentarios
y consiguió bastante éxito entre los críticos de
moda. La polémica sobre esta obra prosiguió hacia la publicación
de una artículo aclaratorio en el diario "Le Matin".
Explicaban que el verdadero
autor de la pintura era el burro Lolo cuyo propietario era el dueño
del "Lapin Agile".
Contaban que los alegres
feligreses de este cabaré, Dorgelès, Warnod y Depaquit,
habían atado un pincel a la cola del estimable animal instalado
delante de la puerta del "Lapin Agile", y mencionaban que
la producción del "artista" había ocurrido bajo
el control de un ujier.
¡Hilaridad general!
Por cierto la constatación
de este ujier forma parte de los actos que se conservan preciosamente
en los archivos de la profesión.
Ahora sólo falta añadir
que Boronali no es más que el anagrama de "aliboron",
palabra que empleaba La Fontaine para designar un burro.