Esta estimable asociación
se encarga entre otras cosas de la venta de las 700 botellas que
produce la viña de Montmartre.
Lo chistoso de la historia
es que cuando compras una botella, te entregan un recibo. El modelo
es "aprobado por la Dirección General de Haciendas"
y puedes usarlo para conseguir una desgravación fiscal.
Comprar vino para pagar
menos impuestos... eso será una forma de surrealismo "a
la francesa".