Ese día, en
la esquina del callejón número 1, presentaban el
"muy de moda" mueble de cajones etiquetados , unas viejas
estanterías que siempre pueden servir, varias arañas
antiguas, vajilla tradicional y la imprescindible colección
de jarras para guardar los ingredientes elementarios...
Uno podría escribir una tesis sobre estas colecciones,
el uso teórico de las jarras, sus tamaños respetivos
y las variaciones a lo largo de los años.
Más abajo, en
el mismo callejón, me paré un rato en la gran tienda
cuya especialidad es la cocina, sus muebles y sus utensilios.
Aquí la instalación podría formar parte de
algún museo de los
Artes Populares y varios utensilios provocan la perplejidad de
los visitantes.
Yo me dejé seducir por esta impresionante colección
de cucharones, espumaderas y cazoletas.