Eso explica la relativa
tranquilidad de esta preciosa galería.
Pocos clientes, algunos
viandantes
extraviados y a veces un grupo con guía-conferencista...
Confieso que cada
vez que paso por este lugar descubro algún detalle extra
pero pocas veces lo encontré tan desierto.
Así que aproveché
el momento para estudiar más detenidamente una de las
diosas.